viernes, 6 de marzo de 2009

suerte

Tu cuerpo delgado, se escurre entre mis brazos. No sé que me ha llevado a esto. Solo sé que tú sin querer lo has causado. Comienzan a sonar las sirenas a lo lejos y te hablo y no me escuchas y mis lágrimas caen encima de tu cuerpo ensangrentado. Me asusto y me arrepiento, pero no puedo regresar al pasado. Trato de cerrar fuertemente mis ojos y me balanceo en el suelo, con tu cabeza en mi mano y tu espalda en mis rodillas. Trato de no pensar en lo que acabo de hacer y vuelvo a cerrar mis ojos y prefiero pensar en todos los bueno momentos que vivimos juntos.
En lo estrecha que te pusiste aun sabiendo que me querías, y aun sabiendo que moría por ti.
Cuando celebramos tu cumpleaños (de noche) en tu playa preferida, con algunos amigos, en la cual terminaste arrepentida.
La primera vez que te lleve al teatro y quedaste decepcionada porque, tu actor preferido era enano, y no una palmera como lo pintaban.
Lo emocionada que te pusiste, cuando conseguí 2 entradas para el concierto del artista que pensaste nunca verías .
Lo asustada que estabas cuando me presentaste a tu padre, al cual nunca le habías presentado un novio.
Lo feliz, asustada y desconcertada que estabas cuando no te bajo tu mes y emocionada me lo dijiste. Hasta buscabas nombres, pero todo se arruino días después cuando te vino.
Siempre te dije que la verdad era una base importante de una relación. Me dijiste que también pensabas lo mismo, pero no lo demostraste.
Hasta que era tan obvio…
Luego de 1 año de relación feliz, con problemas como todas las parejas, pero sobre todo una relación con amor. Me sentaste en un sofá y fuiste clara y sincera. Seguro también porque pensaste que yo, ya lo sabia ó porque, ya no podías con tu conciencia tan llena de dolor.
Me dijiste que ya no me querías, que ya no sentías (por mí) esa cosa por la cual te enamoraste. Dijiste que no sabias, si ¿era yo?, o ¿tú? Pero más trataste de echarte la culpa tú. Me diste a entender que mejor era cortar por lo sano y dejar la relación como todo lo bonito que había sido.
Quiero pensar que en ese momento yo no era consiente de lo que escuchaba. Tus últimas palabras me dejaron completamente idiota, que me entraba por una oreja y salía por la otra. Acepte todo lo que dijiste y hubiera aceptado y firmado cualquier cosa luego de escuchar que ya no querías seguir conmigo. Saliste por la puerta de tu casa y no volví a saber nada de ti, hasta una semana después, cuando un amigo me informó qué, salías con otro.
No podías volver a recordar todos los momentos que vivimos, y ahora en vez de perpetuarlo conmigo ponías en mi lugar a un chico el cual… no era yo. Era otro en mi lugar.
Una tarde, luego de muchos días, noches y trasnoches preguntándome si aceptarías una invitación, decidí llamarte. Total, no tenia que perder nada en lo absoluto.
Me contesto tu actual pareja, un tal Raúl, según él. Pero al momento escuche tu dulce voz. Creo que te sentó mal que te llamara, lo sentí en la forma de cómo me respondiste sabiendo que era yo.
No te gusto nada -lo sentí- y decidí colgar de la forma más estúpida y tonta posible.
Una mañana, luego de no poder dormir, otra vez. Decidí coger el coche y esperarte afuera de tu casa. Quería ver al tal Raúl, ése que había hecho de mi vida lo que para un niño es no tener navidad.
Es cierto, tenía mas porte que yo, seguramente tenga más pasta, pero también tengo que reconocer otra cosa, que feo era el cabrón.
Una noche decidí tocar la puerta de tu casa y me abriste, más guapa que nunca, más guapa que cualquiera. Me preguntaste ¿que hacía por aquí?
Te conteste que te extrañaba, que me des una respuesta.
¿Que hice mal?
¿Podemos volver?
Me abrazaste y me dijiste que sentías mucho verme de esa forma. Y yo también me lamentaba verme… “así”, de esa manera, como un pobre perro pulgoso pidiendo a ladridos que lo adopten, justo cuando a tu lado tienes un cachorro de raza (moviéndote la cola).
Si quieres, soy tu perro.
Solo me miraste a los ojos y dijiste que nunca pudiste quererme como yo a ti.

Discúlpame pero no te quiero, y creo que nunca lo hice.

Llore como un niño en tu hombro y me alejaste con tus 2 manos prácticamente echándome de tu casa, diciéndome n tono burlesco… mas suerte para la próxima.
Salí del portal y saque de mi bolsillo un cigarro y me duro menos de 1 minuto, mientras lo fumaba e iba caminando por las calles empapadas, solo tenia algo en la cabeza que se repetía, más suerte para la próxima, mas suerte para la próxima, mas suerte para la próxima …
Mire el cielo, era perfecto, mis 2 manos frotaron mi cara y no dejaron rastros de lagrimas en ella. Sonreí.
Decidí ir a la casa de mis abuelos, el coche volaba por el asfalto.
Llegue abrí la oficina de mi abuelo y con la ayuda de la combinación semi-secreta y la ultima y mejor escopeta que había comprado, tomé todo los cartuchos que había en una pequeña caja roja.
Volví a su casa, toque y abrió. Me abrió y dijo en un tono burlesco: ¿y ahora que quieres?
La tomo por el cuello, cierro la puerta y la llevo hasta la sala, la tiro encima del sillón, no le doy tiempo a decir ni una sola palabra cuando le digo: que te vaya bien, suerte.
Y dispare, directo al corazón. De la manera mas fría y mas contenta del mundo, el alivio me hizo respirar hondo.
No la dejo de mirar, tiro la escopeta, llamo a una ambulancia y la abrazo y lloro y sigo llorando y me pregunto: ¿porque?
Pasan unos minutos y escucho la ambulancia debajo de la casa, comienzan a golpear la puerta cada vez más fuerte, tengo miedo, tengo mucho miedo.
Abren, mucha gente corre hacia mí, pero llegan tarde, ya había jalado el gatillo, justo en mi barbilla.

5 comentarios:

  1. a kien le has robado este relato.puedo decir despues de leerelo ke esto no es tuyo, no es tu forma de escribir... o estas mutando otra vez.
    igual ya deja de fumar eso...

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  2. ahh eso es algo que te comentare cuando te vea. nada, tienes razon los textos son de mi querido sobrino andre -de casi 17 años- que tiene la curiosidad de saber como van sus textos en un blog. ojala se ponga las pilas y abra un blog, porque a mi este relato me encanto.
    este es entonces un breve entremes en lo que logro recuperar la informacion de mi ordenador oks nos vemos man.

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  3. oye que te pasa ah...
    asesino en serie, ahora tus memorias me estan matando, que viene ahora un viaje a la luna... mentira prescioso me gusto, muy dark pero me gusto.


    noa.

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  4. vos ahora sos como el anfitrion de todos lo pibes que quieren escribir. Pero me gusta Grande roy.

    via

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